Festival de Fantasía de Fuenlabrada II

Bueno, para romper un poco el molde de las reseñas y demás entradas hablando exclusivamente de libros, hoy voy a contaros un evento que he descubierto este año (aunque es tan sólo su segunda edición) gracias a una amiga mía: el Festival de Fantasía de Fuenlabrada, en Madrid. A pesar de haber leído la programación, éramos novatas en estas cosas y no sabíamos muy bien qué íbamos a encontrarnos, pero ambas hemos vuelto a casa encantadas con el festival (¡y con nuestras compras!).

El espacio en sí no es un lugar muy grande: tres salas para conferencias y charlas, una zona infantil y un pabellón exterior con un puesto de libros, otro de ilustraciones y otro de adornos y demás accesorios de estilo Steampunk, que es el motor principal del festival. Aunque los eventos más interactivos eran el sábado y sólo pude ir el viernes, estoy muy contenta con el festival y sin duda repetiré, ¡aunque me habría gustado poder desdoblarme para asistir a algunas charlas que tenían el mismo horario!

Lo más difícil de todo ha sido elegir qué charlas queríamos oír, porque todo estaba muy bien organizado y parecía muy interesante. Al final nos decidimos por una de Nuevas voces en la literatura juvenil, con cuatro autores que publicaban por primera vez en papel. Tengo que reconocer que no suelo leer mucha literatura de autores españoles, no sé muy bien por qué (tal vez porque se les da menos difusión que a los bestseller internacionales), pero he salido del festival con la firme intención de remediar eso pronto. Todos los autores fueron de lo más agradables en la charla, y el ambiente parecía más una reunión de amigos que una conferencia, todo muy relajado y realmente divertido; salí de allí queriendo llevarme todos sus libros.

Finalmente, después de curiosear un poco en general, nos decidimos por una segunda charla, Creación de mundos Steampunk. El Steampunk es una corriente retro-futurista que se sustenta sobre todo en la época victoriana y los dirigibles y máquinas de vapor, creando una especie de alternativa del mundo real (un ejemplo sería el libro Leviathán, de S. Westerfeld); es decir, parte de una base histórica y modifica diversos hechos en la historia que alteran el presente, aunque los que reconozcáis el término seguramente sea más por las ilustraciones y estilos de vestir increíblemente atractivos que se generan.

Como todo el festival se basa en esta corriente artística y literaria, había bastante presencia de elementos retrofuturistas, y la charla me encantó. Salí de allí con la cabeza bullendo de ideas sobre la creación de mundos, y lo divertido que es modificar el hilo de la historia como si fuera un juego de rol; y aunque aún no he podido ponerme con ello tengo muy claro que, al menos, voy a intentarlo.

En cuanto a nuestras compras, me habría encantado llevarme medio puesto de libros, pero el espacio en mi casa y el dinero son limitados, así que aunando gastos con mi amiga al final nos hicimos con tres (y una enorme lista de otros para buscar en el futuro):

Alianzas. Cuentos de la luna llena I.

de Iria G. Parente y Selene M. Pascual.

De este libro decir que sus autoras son dos chicas encantadoras y que después de la presentación del libro y de la preciosa lectura que hicieron de las primeras líneas, ¿cómo iba a resistirme a hacerme con él?

Espero leerlo pronto y traeros la reseña.

Loba

de Verónica Murguía, premio Gran Angular.

Aunque no había presentación de este libro, después de darle un millón de vueltas a todo nos decidimos por él, porque tanto la portada como la sinopsis llaman mucho la atención y, además, es fantasía pura y parece tener un poco de romance, una combinación irresistible.

Hisnal. Cuentos para quien no ha dejado de soñar.

de Antonio Vladimir García.

Una colección de cuentos ambientados en mundos de fantasía, cuya sinopsis simplemente enamora, y perfecto para leer a ratos ya que los cuentos son autoconclusivos y bastante cortitos.






Aunque sólo fue un día lo que pudimos estar en el festival, lo cierto es que es totalmente recomendable, todo el mundo fue muy agradable y reinaba un ambiente alegre y vivo, todo con la ambientación de fondo del Steampunk que le daba un toque único. Sin duda alguna, el año que viene repetiré, y os lo recomiendo a todos los que viváis en Madrid y alrededores.

Y vosotr@s, ¿conocíais el festival? ¿Os gustaría asistir? ¿Conocéis otros festivales similares?