Autor: David Lozano
Editorial: Alfaguara
Orden de lectura: Tomo único
Páginas: 344 págs.
Precio: 14,50 €
Valoración Personal: 6,5/10 Entretenido.
Sinopsis: Un grupo de estudiantes ha sido seleccionado para formar parte de un experimento: el proyecto Hyde. Deberán convivir en un gran caserón apartado del mundo durante una semana sometidos a una terapia subliminal aparentemente inofensiva. Pero cuando se produce el primer asesinato, todo se dispara bajo un ritmo frenético de persecución y sospecha.Ya no hay nadie en quien confiar. Cualquiera dentro de los muros de la casa puede ser el asesino, camuflado dentro del grupo, dentro del anonimato. Cualquiera... incluso uno mismo.Algo hace especiales a estos chicos: algo que desconocen pero que vincula sus vidas, algo que tendrán que descubrir a tiempo si quieren salvarse
Reseña
Antes de empezar, tengo que admitir que tal vez tenga algunos prejuicios con el argumento del libro ("adolescentes encerrados en una casa vieja donde va muriendo gente"). No por el argumento en sí, sino porque acaban sacándome de quicio las reacciones de los personajes, que tienden a decidir que la mejor manera de protegerse es quedarse solos, a ver quién se lo pone más fácil al asesino. Dicho esto, intentaré ser lo más objetiva posible en mi valoración.
En conjunto, Hyde no me ha parecido un libro de terror, sino más bien de suspense. Comienza con un prólogo que parece no tener sentido, y se desarrolla con dos historias paralelas: la de los chicos dentro de la casa, narrada principalmente desde el punto de vista de Hugo, uno de los participantes en el experimento Hyde; y por otro lado la investigación policial de un asesinato en la ciudad que acaba estando conectado, como es fácil suponer, con el proyecto Hyde.
Uno de los puntos que más me ha gustado del libro ha sido precisamente la investigación policial, ya que me ha parecido bastante realista dentro del ámbito de la novela. No cae en los estereotipos de policías que consiguen sacarse pruebas y evidencias de la manga, aunque sabes a dónde les va a llevar todo es bastante ameno de leer y, como son trozos cortos dentro de cada capítulo, no se hacen aburridos.
Por otro lado, lo que sucede en la casa es un escenario bastante clásico. Un grupo de adolescentes han sido seleccionados en su instituto para realizar un experimento que fomenta los hábitos de lectura, y se los llevan una semana a un caserón perdido en las montañas. Durante la semana estarán totalmente incomunicados, un profesor se limitará a vigilar desde fuera de la casa, y deben cumplir un estricto programa de visualizaciones que contienen mensajes subliminales para fomentar la lectura.
Como era de esperar, al día siguiente los chicos se encuentran con que uno de ellos ha sido asesinado y una nota del profesor donde les explica que el proyecto no tiene nada que ver con la lectura, sino con la violencia, y que los contenidos de las proyecciones estimulan su cerebro para cometer actos violentos. Por lo tanto, cualquiera de ellos puede convertirse en un asesino en potencia incluso sin pretenderlo.
Objetivamente, el libro no está mal. A pesar de que da algunas pistas, no son obvias hasta que el argumento empieza a volverse enrevesado. Tiene un par de golpes de efecto que no te esperas desde el principio, aunque son bastante fáciles de adivinar una vez el argumento está al llegar a ellos; y si intentas no fijarte mucho en las posibles pistas no adivinarás quién es el/los asesino/s hasta casi el final, aunque hay un punto en que puede resultar bastante obvio una vez echas la vista atrás.
Sobre los personajes, el protagonista me ha parecido un chico bastante cabal, aunque en general parece demasiado calmado para la situación que está viviendo (vamos, está muriendo gente y piensa "bueno, al menos conozco a la chica que me gusta"). Los demás personajes parecen un poco estereotipados, pero no tanto como para resultar repelentes y actúan de forma bastante razonable (miento, salvo el extraño chico al que le da morbo la sangre y para el cual ver un cadáver no es nada del otro mundo, ese chico no es normal).
Así que, salvo los momentos en que deciden que la vía de actuación más razonable es quedarse solos (¿en serio?) y que yo ni muerta optaría por quedarme en esa casa aunque no haya nada en kilómetros a la redonda, el argumento puede resultar creíble y los chicos actúan como los adolescentes que son casi todo el tiempo. Al menos, el autor se ha molestado en currarse una excusa para llevar a los chicos al fin del mundo y que nadie se preocupe por ellos en una semana, lo que se agradece mucho.
De hecho, lo que menos me ha gustado del libro está hacia el final, porque hasta la segunda muerte, más o menos, no tengo muchas pegas. A partir de ese momento tengo la sensación de que empieza a hacerse muy obvio de qué va realmente la cosa, y aunque haya algunos puntos que pueden despistarnos un poco ya nos olemos el asunto y la mayor parte de los sucesos no nos sorprenden. Además, aunque hay a quienes les ha gustado mucho, el final simplemente me horrorizó porque me parece totalmente injustificado.
No puedo decir mucho más, porque revelaría detalles del argumento y, aunque muchas cosas te las esperas según vas avanzando, no quiero destripar nada. Probablemente a muchos el libro os haya gustado más, de hecho había leído por ahí buenas críticas, pero ciertos aspectos del libro simplemente no me llenan -admito mis prejuicios-, por lo que por desgracia no puedo decir que sea un libro que me haya gustado demasiado.
En conjunto, Hyde no me ha parecido un libro de terror, sino más bien de suspense. Comienza con un prólogo que parece no tener sentido, y se desarrolla con dos historias paralelas: la de los chicos dentro de la casa, narrada principalmente desde el punto de vista de Hugo, uno de los participantes en el experimento Hyde; y por otro lado la investigación policial de un asesinato en la ciudad que acaba estando conectado, como es fácil suponer, con el proyecto Hyde.
Uno de los puntos que más me ha gustado del libro ha sido precisamente la investigación policial, ya que me ha parecido bastante realista dentro del ámbito de la novela. No cae en los estereotipos de policías que consiguen sacarse pruebas y evidencias de la manga, aunque sabes a dónde les va a llevar todo es bastante ameno de leer y, como son trozos cortos dentro de cada capítulo, no se hacen aburridos.
Por otro lado, lo que sucede en la casa es un escenario bastante clásico. Un grupo de adolescentes han sido seleccionados en su instituto para realizar un experimento que fomenta los hábitos de lectura, y se los llevan una semana a un caserón perdido en las montañas. Durante la semana estarán totalmente incomunicados, un profesor se limitará a vigilar desde fuera de la casa, y deben cumplir un estricto programa de visualizaciones que contienen mensajes subliminales para fomentar la lectura.
Como era de esperar, al día siguiente los chicos se encuentran con que uno de ellos ha sido asesinado y una nota del profesor donde les explica que el proyecto no tiene nada que ver con la lectura, sino con la violencia, y que los contenidos de las proyecciones estimulan su cerebro para cometer actos violentos. Por lo tanto, cualquiera de ellos puede convertirse en un asesino en potencia incluso sin pretenderlo.
Objetivamente, el libro no está mal. A pesar de que da algunas pistas, no son obvias hasta que el argumento empieza a volverse enrevesado. Tiene un par de golpes de efecto que no te esperas desde el principio, aunque son bastante fáciles de adivinar una vez el argumento está al llegar a ellos; y si intentas no fijarte mucho en las posibles pistas no adivinarás quién es el/los asesino/s hasta casi el final, aunque hay un punto en que puede resultar bastante obvio una vez echas la vista atrás.
Sobre los personajes, el protagonista me ha parecido un chico bastante cabal, aunque en general parece demasiado calmado para la situación que está viviendo (vamos, está muriendo gente y piensa "bueno, al menos conozco a la chica que me gusta"). Los demás personajes parecen un poco estereotipados, pero no tanto como para resultar repelentes y actúan de forma bastante razonable (miento, salvo el extraño chico al que le da morbo la sangre y para el cual ver un cadáver no es nada del otro mundo, ese chico no es normal).
Así que, salvo los momentos en que deciden que la vía de actuación más razonable es quedarse solos (¿en serio?) y que yo ni muerta optaría por quedarme en esa casa aunque no haya nada en kilómetros a la redonda, el argumento puede resultar creíble y los chicos actúan como los adolescentes que son casi todo el tiempo. Al menos, el autor se ha molestado en currarse una excusa para llevar a los chicos al fin del mundo y que nadie se preocupe por ellos en una semana, lo que se agradece mucho.
De hecho, lo que menos me ha gustado del libro está hacia el final, porque hasta la segunda muerte, más o menos, no tengo muchas pegas. A partir de ese momento tengo la sensación de que empieza a hacerse muy obvio de qué va realmente la cosa, y aunque haya algunos puntos que pueden despistarnos un poco ya nos olemos el asunto y la mayor parte de los sucesos no nos sorprenden. Además, aunque hay a quienes les ha gustado mucho, el final simplemente me horrorizó porque me parece totalmente injustificado.
No puedo decir mucho más, porque revelaría detalles del argumento y, aunque muchas cosas te las esperas según vas avanzando, no quiero destripar nada. Probablemente a muchos el libro os haya gustado más, de hecho había leído por ahí buenas críticas, pero ciertos aspectos del libro simplemente no me llenan -admito mis prejuicios-, por lo que por desgracia no puedo decir que sea un libro que me haya gustado demasiado.
6,5/10
Y vosotr@s, ¿lo habéis leído? ¿Os ha gustado?
Esta reseña participa en el reto Bloglitween'14, de Constelaciones Asimétricas.
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Para ir a las reseñas de los demás participantes, clicad sobre los títulos:
Worlds inside books: Pary games, de R.L. Stile
No puedo vivir sin libros: Cuentos tenebrosos, de Edgar Allan Poe
Películas, libros y más: Dagon, H.P. Lovecraft
El devorador de palabras: El gato negro y otros cuentos de horror, Edgar Allan Poe
Leyendo el universo: El gato negro, Edgar Allan Poe
Constelaciones asimétricas: Corazones en la Atlántida, Stephen King
Al principio me llamaba un poco la atención, pero si tiene un argumento tan trillado (¿quedarse solos? ¿en serio? ¿no hemos aprendido nada de las películas? xD), me echa para atrás... Prefiero reservar el tiempo para un libro que me estimule más.
ResponderEliminarJajaja, no, nadie aprende nunca nada de las películas...Nada más ver la casa donde iban a dejarlos, yo habría salido pitando monte abajo xD De todas formas, hay críticas muy buenas del libro, así que igual sólo soy yo que soy muy escéptica y por eso no me ha terminado de gustar.
EliminarSaludos!
Al principio solo escuchaba maravillas del libro ...ahora ya me estoy desanimando un poco en leerlo .... Gracias por la reseña=) . Besos
ResponderEliminarpsdt: Soy nueva por aquí y te sigo =)
¡Hola! Muchas gracias por pasarte, me alegro de que te haya gustado el blog ^^ Yo también había leído maravillas del libro, así que igual soy solo yo, que no me termina de convencer el argumento...
EliminarSaludos!
¡Hola!
ResponderEliminarYo también tengo ciertos prejuicios con este libro, aunque no creo que me desagradara, no sé, no me acaba de convencer el rollo peli americana de miedo, con alumnos de instituto en una casa. Pero me han hablado bien de él y aunque dudo que me lo compre, si lo veo en la biblioteca o algo así, quizá lo coja para ver que tal.
Gracias por la reseña!
¡Un beso!
¡Hola! No, no es un libro desagradable (si lo fuera no habría llegado a terminarlo), pero el argumento es tan de película...De todas formas, si al final lo lees espero que te guste ^^
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